LA MEJOR HERRAMIENTA PARA CAMBIAR EL MUNDO
En estos últimos 14 años en los que estos proyectos se han impulsado con constancia y esfuerzo en Senara, hemos comprobado que la oratoria va mucho más allá de hablar con corrección. Mejora la expresión escrita, impulsa la adquisición de vocabulario, refuerza las rutinas de pensamiento y, lo más importante, agiliza el proceso madurativo personal.
Los días 17 y 23 de marzo un grupo de alumnas de 2º de Bachillerato de la Escuela de Debate y Oratoria representó a Senara en el torneo organizado por el colegio “Esclavas Chamberí”. El tema era de total actualidad “¿Debería ser obligatoria la vacunación para hacer frente a las enfermedades?”.
Participamos en cuatro reñidos enfrentamientos cuyo resultado fue un merecido 4º lugar. Tuvimos que defender la postura a favor en tres de ellos y en uno, la postura en contra. La dinámica del debate consiste en preparar los dos enfoques, que lejos de generar confusión, te obliga a pensar; así lo explican las propias debatientes “ayuda a desarrollar el pensamiento crítico y a querer buscar la verdad” (Belén A.) y “te hace descubrir otros puntos de vista que no te hubieras planteado” (Teresa F.). Además ves a tu contrincante no como un enemigo sino como alguien que opina diferente a ti y por eso el debate previene del extremismo, el radicalismo y el fundamentalismo, porque abre tu mente.
Es ésta actividad el culmen de la ilusión y el trabajo en equipo de muchas profesoras, ya que desde Primaria y a lo largo de Secundaria las alumnas trabajan habilidades entorno a la expresión oral y las que voluntariamente desean presentarse a concursos de oratoria (Comunidad de Madrid, Impacta, Concurso Nacional Bancarrota, etc.…) reciben el entrenamiento personal necesario.
En estos últimos 14 años en los que estos proyectos se han impulsado con constancia y esfuerzo en Senara, hemos comprobado que la oratoria va mucho más allá de hablar con corrección. Mejora la expresión escrita, impulsa la adquisición de vocabulario, refuerza las rutinas de pensamiento y, lo más importante, agiliza el proceso madurativo personal. María M. afirma “He aprendido cuáles son mis límites, lo que me puedo llegar a exigir y lo que no”, Ángela B apunta “me ayuda a salir de mi zona de confort” Elena A: “me ha ayudado a mejorar como persona”.
El debate es una herramienta para hacer realidad lo que Senara promete a sus alumnas: Ser las líderes del siglo XXI. Por eso cuando nuestras alumnas llegan a la universidad son delegadas en el 99% de los casos porque como dice Anastasia “con el debate he aprendido a ser más libre pensando”, “a reconocer la demagogia que es hablar desde el desconocimiento” (Lucía F.) y “aprender a persuadir” (Rocío R.).
Es un privilegio comprobar cómo día a día las alumnas se van superando. Es un privilegio soñar que un día su discurso tendrá lugar en la UE, la ONU o en cualquier otro foro en el que desde la verdad se defienda la justicia, la vida… Será, sin duda, la mejor herramienta para cambiar el mundo.